Don´t Touch The Door

Luego de un exceso de copas en una fiesta y de haberse echado a caminar solo a la deriva, Kyle se despierta a altas horas de la madrugada con un terrible dolor de cabeza.  Entonces se da cuenta de que se encuentra en el suelo de una tenebrosa y polvorienta habitación, en una especie de mansión abandonada; y de que, para peor, no está solo en el lugar.  Algo o alguien parece acercarse lentamente, desde algún otro rincón del edificio, susurrando frases tenebrosas La desesperación lo lleva a llamar a Hank, quien en un principio recuerda lo divertido de la situación pero luego se preocupa por él.  Ante su miedo, decide ayudarlo a salir del tétrico lugar, ya que conoce la mansión porque de niño solía husmear y jugar allí.  Así que, mediante mensajes de texto, intenta guiar a su amigo a través del lúgubre laberinto de puertas.